Técnicas simples de mindfulness y meditación para niños

Las técnicas de mindfulness y meditación son beneficiosas tanto para grandes y chicos. Puede que algunas personas piensen que los niños a tan corta edad, no pueden ser capaces de aquietar su mente, prestar atención al aquí y ahora y entrar en estados de calma y tranquilidad. Pues con estas simples técnicas que podrás realizar ya sea con tus hijos o alumnos, te darás cuenta que sí. Lo importante siempre cuando se trata de niños es introducir estas enseñanzas de manera más lúdica.

Y ojo…, lo que te enseñaré ahora puedes practicarlo tú también. Se pueden lograr muchas cosas cuando como padres nos damos el tiempo de practicar estas herramientas tan saludables en conjunto con nuestros hijos. Como sabes el mejor ejemplo para un niño son sus padres. Entonces si te das el tiempo para practicar un momento cada día estas técnicas con tus hijos, ellos desde pequeños no solo ya comenzarán a conocer estrategias que los ayuden a vivir de manera saludable y en equilibrio ( porque aunque no lo creas los niños también se estresan), sino que estos hábitos saludables los adoptarán de manera mucho más fácil, pues verán que tú los realizas también; y como te dije arriba, nuestros niños más que seguir lo que les decimos, siguen nuestro ejemplo, lo que ven en nosotros.

Así que aquí te dejo estas técnicas:

DUÉRMETE NIÑO:

Este es un ejercicio recomendado para niños pequeños. Les sirve para aprender a ser conscientes de su respiración, lo que hará que se relajen y calmen su mente y emociones. Acostado en el piso, se le pone al niño un peluche en su abdomen,  el pequeño puede estar con sus ojos cerrados o bien abiertos. Luego le decimos que comience a respirar y ponga atención en el movimiento que hace su abdomen al inhalar, que sube el peluche y al exhalar, que baja el peluche. De esta manera imaginamos que meciendo al peluche lo hacemos dormir.  Al momento que hacen esto, se les puede preguntar cómo sienten su cuerpo, si notan alguna sensación distinta. En mis clases de yoga para niños, yo les pregunto sus sensaciones y siempre tienen una respuesta, te sorprenderás; te pueden decir que se sienten extraños, con sueño, relajados, que se sienten bien…, la idea aquí es ir guiándolos con nuestras preguntas. El poner en palabras lo que sienten, ayuda a los niños a ir tomando conciencia de sí mismos, sus sentimientos y emociones, y lo diferente que podemos sentirnos cuando respiramos estando concentrados en nuestra respiración.

Realizando el ejercicio, de igual forma se les indica que si no pueden concentrarse en su respiración , pueden decir en voz alta «arriba» cuando el abdomen y el peluche suben y decir «abajo» cuando el abdomen y el peluche bajan, esto los ayudará a estar más concentrados. Pueden realizar este ejercicio unos 3 minutos, o más, cuando se requiera utilizar para un momento expecífico donde se busque que el niño se calme y tranquilice.

Esta técnica también puede realizarse con niños más grandes, con la variación de que en vez de poner un peluche en el abdomen, puede ponerse un barco hecho de papel. Se le indica entonces al niño que debe imaginar que su abdomen es el océano que mece al barco de manera tranquila. También puede ponerse un cojín o almohada que sea liviano.

Recuerda que será mucho más entretenido y estimulante para tu hijo que realices este ejercicio con él de vez en cuando. Así aprenden juntos a ser conscientes de su respiración. Pues aunque parezca simple, de adultos no solemos respirar de manera correcta, la mayoría de las veces respiramos de manera superficial,  involucrando muy poco o casi nada la parte baja de nuestro abdomen en la respiración. Así que animándote a realizar esta técnica con tu hijo, al tiempo que pasan un rato juntos; también te aportará calma y bienestar a ti.

INHALANDO LO POSITIVO Y EXHALANDO LO NEGATIVO:

Este ejercicio de respiración ayuda a los niños a empoderarse, dejar ir la negatividad y volver a la calma y tranquilidad. Así que es especial para aquellos momentos puntuales en que tu hijo o alumno necesite dejar ir pensamientos negativos y requiera reestablecer la paz y confianza en sí mismo. De igual forma se puede utilizar en cualquier momento, pues el impacto positivo de esta técnica en nuestros niños es notoria si se realiza de forma regular. Pues los hace tomar conciencia de que son mucho más que sus miedos y los pensamientos negativos, que en ocasiones pueden tener sobre sí mismos.

Se le pide al niño que se siente de manera cómoda y que cierre sus ojos. Luego le indicamos que tenga un pensamiento positivo sobre sí mismo. Si en un principio te dice que no se le ocurre, podemos guiarlo: «Soy Fuerte», «Soy Valiente», «Soy un Niño Feliz», «Soy un Niño Inteligente», «Yo puedo»… Si este ejercicio lo utilizan para un caso específico, la idea es reforzar el pensamiento positivo acorde a la situación puntual que el niño requiera trabajar y gestionar. Luego que tenemos el pensamiento positivo en mente, se le indica que al inhalar debe imaginar como ese pensamiento se agranda, se agranda tanto que llega hasta su corazón, también le decimos que observe e imagine como luego se dirige a todas las partes de su cuerpo. Al exhalar le decimos que deje ir todos los pensamientos negativos que puedan aparecer en su mente. Ejemplo: si inhalo «Yo puedo lograrlo», exhalamos todos los pensamientos contrarios a este como: «Yo no puedo», «Yo no soy capaz», «Soy tonto»… Seguimos con este ritmo, inhalamos y agrandamos el  pensamiento positivo y exhalamos eliminando y dejando ir los pensamientos negativos. Se le indica también que al exhalar imagine como todos esos pensamientos negativos abandonan su cuerpo y salen a través de la ventana en dirección al cielo.  Terminando el ejercicio, en las últimas respiraciones, les pedimos que se concentren en el pensamiento positivo, así reforzamos el sentimiento de poder y confianza. Una vez que terminan, les podemos preguntar cómo se sienten.

Puedo apostar en estos momentos que estás pensando que este ejercicio también podrías utilizarlo contigo mismo…¿o no?, je, je…Y te digo que ¡CLARO QUE SÍ!  Los ejercicios en los que combinamos tanto respiración, como afirmaciones positivas y visualización son muy efectivos. El poder que tienen nuestras palabras y todo cuanto imaginamos crea realidades e impacta de manera extremadamente satisfactoria en nuestra mente.  Yo utilizo estas técnicas conmigo misma, y te puedo decir que he obtenido muy buenos resultados. Así que te animo a ti también a realizarlo.

PENSAMIENTOS DE GRATITUD:

Esta herramienta y técnica es una de mis favoritas. La utilizo mucho en mis clases de yoga Madre e Hijos. Es increíble el poder que tiene la gratitud en nuestras vidas. Podría hablarte y hablarte de sus beneficios. Qué mejor entonces que enseñemos este poderoso hábito a nuestros niños, y más aún si realizamos este bello y enriquecedor ejercicio en conjunto y en familia. La gratitud aparte de aportarnos sentimientos de optimismo, alegría y bienestar,  alejarnos de pensamientos de negatividad y carencias; es una poderosa herramienta de mindfulness (atención en el aquí y ahora) . Pues nos hace conectar plenamente con el presente, al apreciar y valorar todo cuanto tenemos y experimentamos en el aquí y ahora en nuestras vidas. Permitimos que nuestra mente deje de estar perdida en el futuro, en el pasado  y nos ancla al presente. Verás que este es un ejercico muy simple, pero enórmemente enriquecedor.

Primeramente se sentarán frente a frente, se mirarán a los ojos para generar conexión, si quieren pueden tomarse de las manos. Luego cierran sus ojos y comienzan a respirar profundo, escuchando el sonido de su respiración mientras entra y sale por la nariz. Luego juntos van a pensar en todas las cosas buenas que hay en su vida. Se quedarán ahí unos momentos con estos bellos pensamientos en su mente, siendo conscientes de cada sensación que estos pensamientos les generan. Al cabo de unos minutos abrirán sus ojos, se mirarán, sonseirán y compartirán sus experiencias.

Espero que te hayan gustado estas técnicas, que como has visto son sencillas pero aportan muchos beneficios. En otro post te hablaré de otras herramientas para que junto a tus hijos pasen ratos y momentos conscientes. Esto ayudará a los más peques ir adquiriendo poco a poco hábitos saludables, les aportarán bienestar y claro que mucho amor y compañía por parte de mami y papi.

Un abrazo de luz.

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